Karma y reencarnación constituyen la piedra angular de las principales religiones de Asia: el hinduismo, el budismo, el jainismo, el shinkismo, el zoroastrismo, etc. El concepto se basa en la idea de la continuidad del alma y en su regreso para compensar (“limpiar”) o disfrutar del resultado de nuestro buen o mal comportamiento en próximas reencarnaciones. Este renacer estará condicionado por lo que el alma tenga que aprender en función de anteriores vidas. Así pues, ella será quien escogerá sexo, condición social, familia, época en la que nacerá para crecer en conocimiento y sabiduría.
Pensadores de todas las épocas han reflexionado sobre esto, Pitágoras, Platón, Jung, Kant, Voltaire. Dice Schopenhauer Si un asiático me pidiese una definición de Europa, me vería obligado a contestarle lo siguiente: “Es aquella parte del mundo en la cual prevalece la increíble falacia de que el hombre fue creado de la nada y que su nacimiento actual constituye su primera entrada a la vida”.
Es cierto que es de difícil comprobación, pero no por ello se ha evitado investigar el tema seriamente. El Dr. Ian Stevenson, Director de la Facultad de Psiquiatría de la Universidad de Virginia, una de las pocas universidades que realizan estudios paranormales, indagó más de 2500 casos de posible reencarnación en niños que afirmaban haber tenido otras vidas en distintos lugares del mundo. Estos son algunos de los resultados:
1) El niño suele insistir para que lo dejen volver a la comunidad en la que afirma haber vivido anteriormente. En muchas ocasiones el Dr Stevenson tuvo la oportunidad de estar presente en ese momento en que se producen los reconocimientos y, lo que más lo ha impactado, es la fuerte carga emocional de esos encuentros o reencuentros, la emoción que siente el niño al abrazar a familiares de su vida anterior.
2) Las declaraciones pueden ser tales como: "Mis padres viven muy lejos de aquí" acompañando estos comentarios con la descripción de lugares, nombres, personas, etc., con precisión.
3) Otra declaración puede ser: "¡Eso me pasó cuando yo era mayor!", aportando datos concretos acerca de esa experiencia.
Lo singular y característico de este fenómeno es que estos niños hablan de sus vidas pasadas en cualquier lugar, sin interrumpir sus juegos. En cierto momento surge algo que les recuerda un acontecimiento de la vida anterior, hacen un breve comentario sobre ella y luego el recuerdo desaparece. Los padres no advierten nada extraño en la conducta del niño, ni en ese momento ni en ningún otro,
¨Uno de los secretos del mundo es que todo subsiste y nada muere; las cosas solo se pierden de vista y después reaparecen...Nada está muerto. Los hombres se fingen muertos y simulan tener velorios y tristes funerales, mientras miran por la ventana, sanos y salvos, en un disfraz nuevo y desconocido...¨
Ralph Waldo Emerson
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